Última alteração: 2021-04-29
Resumo
Desde Herodoto (I, 24), los autores antiguos nos han transmitido algunos datos sobre la biografía del músico Arión de Metimna, un poeta lírico del siglo VII a.C. que trabajó al servicio del tirano Periandro de Corinto. Más tarde, Arión se convirtió en leyenda al ser salvado por un delfín, que acudió en su auxilio después de haber escuchado su canto. Es, por tanto, una figura semilegendaria, indisolublemente unida a la música y la naturaleza.
Proponemos un acercamiento al poeta griego con el que, tras analizar la aventura marítima de Arión y algunas de sus representaciones más conspicuas (acaso como trasunto de los viajes del afamado músico) y las principales lecturas que han suscitado en diferentes momentos, pretendemos ahondar en sus significados, y muy especialmente, en la relación entre la Música y el rescate en el mar del poeta griego, donde se unen el mito y la realidad.
Para ello, tras una breve incursión a través de los iconotipos más destacados del músico, centraremos nuestra mirada en la Antigüedad y atenderemos a la música asociada al santuario de Posidón en el itsmo de Corinto, donde Arión ejerció su labor como compositor y corifeo y donde todo parece indicar que el ditirambo experimentó una evolución llamada a tener amplias repercusiones, tal vez como consecuencia de las innovaciones introducidas por Arión.
En el santuario del itsmo de Corinto (y como parte de las representaciones de los juegos panhelénicos celebrados en honor del dios del mar) están documentados los "coros de delfines", al menos desde el siglo VI a.C. Parece probable que fuera en dicho contexto donde el músico y sus ditirambos pudieran haberse relacionado con los mitos coligados al dios del mar (o al héroe Melicerte-Palemón) y donde se asociara su prodigiosa salvación con los delfines. Como recuerdo de todo ello, mito y realidad, el delfín pasó a ocupar el firmamento convertido en constelación y Arión, el músico virtuoso (en sentido musical y moral), consiguió también la inmortalidad.